Estabilización de concreto

La estabilización de concreto es crucial en pasos vehiculares sometidos a un intenso y constante tráfico, donde la estabilidad del pavimento es primordial para la seguridad y la eficiencia operativa. De hecho, el movimiento no controlado de estas losas puede llevar a la formación de escalones, fisuras y, en última instancia, a fallos estructurales que comprometen la vía. Por lo tanto, el objetivo principal de este método es restaurar la integridad y el soporte uniforme de dichas placas.

Para lograr esto, el sistema se basa en la inyección precisa y controlada de materiales específicos directamente bajo las losas afectadas. Generalmente, se utilizan productos como concretos fluidos de alta resistencia (tipo grout) y/o resinas epóxicas de baja viscosidad, dependiendo de las condiciones del sitio y los requerimientos del proyecto.

La inyección se realiza mediante equipos y técnicas mecánicas especializadas que permiten introducir el material a presión en los vacíos existentes entre la losa y el subsuelo. Una vez inyectado, el producto fluye y rellena estos espacios, efectivamente levantando y/o estabilizando la placa en su posición correcta.

Como resultado, no solo se detiene el movimiento indeseado, sino que también se confiere una resistencia renovada y una mayor capacidad de carga a la estructura. En consecuencia, se garantiza la seguridad y la durabilidad a largo plazo de las áreas donde se instala este sistema, asegurando la continuidad del tráfico y minimizando futuras intervenciones de mantenimiento.